Nace el NTC en San Fernando de la mano del programa de las corbetas de Arabia

San Fernando/17 años después de que se colocara la primera piedra para la construcción del que iba a ser el acuario más ambicioso de la zona -el Parque de la Historia y el Mar- el edificio levantado en un recinto que ocupa 27.000 metros cuadrados junto al Puente de Hierro, en el camino de La Carraca, se dispone al fin a ser inaugurado. Hoy será el gran día.

Navantia ha transformado el equipamiento en un moderno centro de formación naval que tendrá su estreno con el programa de las cinco corbetas que se construyen en el astillero de San Fernando para Arabia. El edificio, recién reformado y adaptado a su nuevo uso, será clave en la formación de las dotaciones de la Real Marina Saudí, que residirán en La Carraca mientras se adiestran en el manejo de estos buques.

De aquel Parque de la Historia y el Mar, en realidad, no queda ya nada más allá de la característica fachada del inmueble. El proyecto, una mezcla de acuario y museo que hace dos décadas hizo creer a La Isla que podría atraer a turistas y que incluso tras la crisis de 2008 consiguió el dudoso honor de convertirse en uno de los edificios más inútiles y que más había costado (cerca de 10 millones de euros), naufragó estrepitosamente nada más acabar las obras.

Nunca, a lo largo de más de 15 años, consiguió ponerse en marcha. Y, lógicamente, se convirtió en un gran problema para el Ayuntamiento isleño. José Loaiza llegó a referirse literalmente a él como "un muerto" durante su etapa como alcalde de la ciudad, en la que en vano se intentó reflotar el citado Parque de la Historia y el Mar. No había inversores dispuestos porque el proyecto, a todas luces, ni era rentable ni tenía visos de serlo en el futuro a menos que La Isla, de repente, se convirtiera en un municipio turístico y con una gran afluencia de visitantes. Y los términos de la concesión administrativa de Costas tampoco ayudaban a la hora de buscar una salida imaginativa.

Aunque de los múltiples usos que se han propuesto para este edificio a lo largo de los años -se ha pretendido, con más o menos rigor, que fuera desde la sede del campus de excelencia CEIMAR de la UCA a la del Centro de Investigación Subacuática (CAS) pasando por la Escuela de Hostelería de Diputación, un Centro Tecnológico Naval, un Campus del Empleo y hasta el traslado del CADE (Centro Andaluz de Emprendimiento), entre otras opciones- la idea de convertirse en un centro de training avanzado de Navantia era algo que ni siquiera se había pasado por la cabeza.

La propuesta se cruzó en el camino del Ayuntamiento gracias al programa de las corbetas de Arabia cuando, a finales del anterior mandato, la alcaldesa, Patricia Cavada, estaba a punto de tirar la toalla con uno de sus proyectos 'estrella': el Centro de Industrias Digitales al que pretendía dar cabida en estas mismas instalaciones echando mano a los socorridos fondos de la ITI (Iniciativa Territorial Integrada), que para su frustración no conseguía sacar adelante y chocaba con múltiples trabas y escollos.

Así que lo vio claro. Soltó la propuesta de repente en febrero de 2019, cuando apenas quedaban dos meses para las elecciones municipales, después de que los responsables de Navantia visitaran las instalaciones y vieran que el proyecto de centro de formación era viable.

Aquello sorprendió tras años defendiendo el supuesto 'pelotazo' que iba a ser el proyecto del Centro de Industrias Digitales en el Parque de la Historia y el Mar. Y poco se entendió que se rompiera también el convenio suscrito con la Agencia IDEA para su puesta en marcha en el marco de la ITI, lo que le hizo incluso perder estos fondos para La Isla.

Pero el Ayuntamiento necesitaba luz verde para avanzar en la otra propuesta sin pérdida de tiempo, porque corría también el riesgo de que se escapara la oportunidad que se le brindaba de la mano del programa de las corbetas para solventar de una manera definitiva el problema del Parque de la Historia y el Mar.

Las piezas fueron encajando en los meses siguientes. El paso decisivo se dio en diciembre de 2019 con la firma del convenio entre el Ayuntamiento isleño y Navantia para transformar los 1.200 metros cuadrados que tiene el edificio en un moderno centro de training avanzado. Aquello puso de manifiesto que la historia iba en serio y no se trataba de una propuesta más para la larga lista de usos que por entonces arrastraba el Parque de la Historia y el Mar.

Ya entonces se anunció que en la puesta a punto del edificio se invertirían en torno a dos millones de euros. La empresa pública asumiría toda la remodelación interior y el Consistorio se haría cargo de la adecuación de los accesos y del entorno del edificio.

La cosa fue rápida. En enero de 2020 Navantia ya había licitado los trabajos de adecuación, que se adjudicaron semanas después por 1.738.858,83 euros a la empresa Fonsan Gestión y Construcción SL.

Y en mayo las obras consiguieron tener vía libre al dar la Junta de Andalucía su visto bueno al uso propuesto para el edificio como centro de formación y afirmar que encajaba en los términos de la concesión administrativa otorgada en su día para el Parque de la Historia y el Mar. Los trabajos comenzaron en verano.

Las obras que correspondían al Ayuntamiento isleño para la adecuación del entorno fueron adjudicadas en el pasado mes de enero por 297.004,06 euros.

El centro de formación

Ya no es ni el Parque de la Historia y el Mar ni El Barco, que es como a Patricia Cavada le gustaba llamar a ese edificio por su característica forma. Para Navantia las nuevas instalaciones que se van a inaugurar este lunes son el NTC, el Navantia Training Centre.

Después de 9 meses de obras el edificio se ha remodelado por completo y de los acuarios, por supuesto, no hay ni rastro. Eso sí, el interior de las instalaciones no se ha querido mostrar hasta el momento, aunque algunos detalles sí se conocen gracias a los pliegos de condiciones de las obras.

La planta baja, donde se repartían las instalaciones de los acuarios, ha dado paso a las aulas con los simuladores de aprendizaje del manejo de los barcos, que servirán para instruir a las dotaciones de las corbetas de la Real Marina Saudí.

La formación del personal, como explicó Navantia en su día, se realizará con simuladores para todos los sistemas: comunicación, navegación, defensa... El Navantis –presentado recientemente en la feria IDEX que se ha celebrado en Emiratos Árabes Unidos– será la herramienta utilizada en este sentido para la formación de las dotaciones de las corbetas.

Se trata de un simulador inmersivo –tipo avatar– en el que el usuario a los mandos 'controla' a un miembro de la tripulación a la hora de desenvolverse por el buque y hacer frente a las labores que tenga encomendadas en el buque de una manera virtual. Eso le permite hacerse con el manejo y afrontar cualquier posible incidencia que pudiera ocurrir en una situación real.

Para ello, se ha recreado la corbeta en un modelo virtual 3D así como todos los equipos, sistemas y herramientas de a bordo. El objetivo de este training es que las tripulaciones sean capaces de familiarizarse con el barco antes de embarcar en la corbeta. También pueden realizar algunos ejercicios como reaccionar ante situaciones de emergencia por ejemplo, un alarma de incendio– o, incluso, realizar tareas de mantenimiento como quitar un filtro principal del motor.

Al margen de los simuladores, en la planta baja se ha reservado también unos 125 metros cuadrados a la adecuación de un centro tecnológico de soldadura para operarios de Navantia.

La intervención en esta planta baja se completa con la adecuación de un aula de profesores y del departamento de logística coincidiendo con la pieza más cercana al mar, que tiene forma de barco varado y que estaba destinada a restaurante y tiendas en el proyecto del Parque de la Historia y el Mar.

En la primera planta, la sala de exposiciones permanente se ha transformado en seis aulas y un núcleo de aseos.

Otras 15 aulas, dos despachos de superficie mediana y un espacio de administración terminn de configurar esta primera planta, ocupando la parte que da al mar ideada en su momento como sala de exposiciones temporales, sala interactiva y varios despachos.

Básicamente, el NTC se divide en tres partes. La primera es la tecnológica. Incluye ahí el área de simuladores de la serie Navantis enfocada al desarrollo de programas de adiestramiento naval, un área de entrenamiento en soldadura mediante simuladores y un área de realidad virtual y aumentada.

La segunda zona es la de las aulas. El centro contará con un total de 17 aulas flexibles e informatizdas, diseñadas para dar servicios de formación interna, adiestramiento de tripulaciones de buques, actividades externas, etc...

Y el tercer espacio es el de la zona de congresos y jornadas. Incluye una sala de conferencias tipo auditorio y una sala multiusos.

Las obras que quedan

El NTC será inaugurado este lunes a las 12.00 horas por el presidente de Navantia, Ricardo Domínguez García-Baquero, y la alcaldesa de San Fernando, Patricia Cavada. El acto coincidirá con la puesta en marcha del programa de capacitación de las corbetas toda vez que la llegada del primer grupo de la Real Marina Saudí se ha completado durante este fin de semana.

Eso sí, todavía quedan algunas semanas de obras. La parte de la actuación que corresponde al Ayuntamiento isleño conforme al convenio suscrito en su día -la adecuación del entorno- se encuentra al 50% de ejecución, aunque eso no impedirá su inauguración y puesta en funcionamiento.

Hasta la fecha, en esta fase de las obras, se ha llevado a cabo la reparación y pintura de los muros, el desbroce de toda la parcela, la limpieza de esteros, la ejecución de acerado exterior, el desmontaje de tarimas de madera, el arreglo de pavimentos en mal estado y la reparación de arquetas existentes, así como la ejecución de nueva red de evacuación de aguas pluviales.

Y durante las dos próximas semanas los trabajos se van a centrar en la ejecución de rampa de acceso a la parcela y todo lo relativo a los accesos, la limpieza y pintura de las marquesinas de los aparcamientos, el alumbrado, la adecuación de grava y césped en parterres y la colocación de la nueva puerta.

El objetivo es que estos trabajos culminen a primeros de junio, sobre día 10, que es la fecha en la que estaba previsto. Las obras, recuerda el Ayuntamiento isleño, tienen como principal objetivo "convertir todo este entorno en un espacio accesible, que permita el disfrute y que tenga una integración perfecta con un entorno privilegiado como el del Parque Natural de la Bahía de Cádiz, al que se abren también nuevas posibilidades gracias a esta actuación".